Cuando pensamos en nuestra salud nos enfocamos en implementar nuevos hábitos y deshacernos de otros, muchas veces sin detenerse a tomar un respiro y darnos un momento para descansar de la larga lista de pendientes diaria.
Proporciona un estado de bienestar general
Hacer una pausa es esencial para encontrar un estado de tranquilidad ante el estrés y el ajetreo de la vida cotidiana, el descanso permite que la mente y el cuerpo sanen, lo cual es pieza clave de nuestro bienestar, permitiéndonos vivir una vida mucho más consciente y saludable. Al descansar la memoria también mejora, el sistema inmune se fortalece, la presión sanguínea baja, la inflamación en el cuerpo se reduce, además la concentración y capacidad mental mejoran mientras se recuperan los niveles de energía.
Además de dormir al menos 7 horas diarias, los descansos durante el día también son importantes, moverse un par de minutos cada hora en caso de permanecer sentado durante mucho tiempo, hacer pausas constantes y otras opciones alternativas como la meditación pueden ayudar a evitar el agotamiento durante el día.
Impacta positivamente en nuestros hábitos
El consumo constante de vitaminas y minerales impacta positivamente en el descanso porque los niveles de energía se equilibran, mejorando considerablemente la calidad del sueño lo cual va a permitir que experimentemos un estado de tranquilidad y plenitud en nuestro día a día.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) mantenerse hidratado también es fundamental para descansar y sentirse alivianado, está demostrado que mantener niveles saludables de hidratación tiene un efecto directo en nuestro estado mental y cognitivo, promueve la eliminación de toxinas, lo cual es beneficioso para la piel y proporciona vitalidad a nuestos órganos y tejidos.